lunes, 17 de diciembre de 2007

Caracterización de la lógica escolar y de los medios de comunicación

Actitud de la escuela frente a los medios

La escuela surge como el artefacto óptimo que necesitaba la modernidad: ella llevaría al progreso indefinido.
Históricamente la escuela fue la que más sintió el cambio y ala vez se transformo en la institución con más resistencia.
Los medios se transforman en una amenaza constante frente a los programas escolares que se remiten al mandato fundacional (homogeneidad, sistematicidad y continuidad).
En la década del 80 surge la alfabetización audiovisual pero no fue asumida en forma sistemática por loa escuela, quien vio la lucha interna entre la cultura letrada y la cultura en imagen.
Actualmente la televisión actúa como agente sociabilizador, el mundo electrónico se transforma en el ecosistema natural del niño y la escuela no ha encontrado las estrategias pedagógicas necesarias que lleve a hacerse cargo de las demandas de los lenguajes audiovisuales, continuando con practicas de aprendizajes desarticuladas con la realidad.

En nuestras prácticas cotidianas, la actitud frente a los medios, continúa en el curso del mandato fundacional, no se tiene en cuenta lo externo, la gramática escolar es inmune ante la presencia de agentes desconocidos como sucede en este caso con la utilidad de los medios de comunicación
A modo de conclusión, las nuevas estrategias pedagógicas debieran formar jóvenes con espíritu critico , receptores activos, capaces de pensar una televisión como un lenguaje de cultura propia que modifique y forme estructuras cognitivas.

La escuela y los medios audiovisuales

La televisión es un agente de socialización, es el lenguaje materno-natural.
La televisión realmente existente, que no se refiere a documentales, informativos ni televisión educativa que siguen un patrón audiovisual coherente con la escuela, es el fenómeno cultural significativo para la formación de los jóvenes.
El desafío de la escuela es desarrollar en los alumnos la capacidad crítica frente a los medios audiovisuales, para que se transformen en receptores activos de los mensajes, productores y recreadores de los sentidos.
En el contexto de las NTICS los docentes nos sentimos analfabetos audiovisuales y debemos abordar a la televisión como un objeto de estudio y darle un carácter formador.
La comunicación televisiva nos pone en presencia de formas de aculturación que modifican situaciones escolares. Los docentes debemos tener un rol innovador en materia cultural, para reutilizar, recrear, cambiar la información recibida.
Por lo tanto la escuela debe rescatar e incorporar en sus planes de estudio la producción cultural que supone la televisión.